Entre rincones naturales, festivales típicos, postas religiosas y emblemas históricos, La Falda es un paraje serrano imponente para visitar en el Valle de Punilla.Descubrir de qué se trata esta ciudad serrana es un placer en pleno contacto con la naturaleza. Por su especial microclima, La Falda es perfecta para paseos en bici y caminatas. ¿Cuáles son los sitios ideales para recorrer? El cerro La Banderita, el Paseo Bella Vista y el camino del Dragón, entre otros senderos. Además, es clave observar toda la región desde lo más alto de sus miradores: el Cuadrado, Padre Pio y Retiro Bretaña.
Por otra parte, desde aquí uno puede dirigirse a Pampa de Oláen, para disfrutar entre cascadas, ríos y cuevas. Tome nota: por esta región no debe faltar una travesía a caballo. Mientras tanto, los deportes náuticos y la pesca tienen su lugar en el dique La Falda y en la caverna El Sauce, aguarda una aventura subterránea. ¿Otro imprescindible? El complejo recreativo Siete Cascadas, para entretenerse con amigos y en familia.
Reconocida por ser tierra de festivales y celebraciones, La Falda se vive a través de la gastronomía, la música y la danza, combinación que se repite en cada época del año. De esta manera, convoca con su tradicional Festival Nacional de Tango en Julio, la Fiesta Nacional del Alfajor en octubre, La Falda Rock en noviembre y La Falda Bajo Las Estrellas en enero y febrero.Por último, en sus calles, una posta emblemática es el Museo Hotel Edén. Este establecimiento que marcó los comienzos del pueblo, hoy declarado Monumento Histórico Nacional, es ideal para descubrir en una visita guiada. En el camino, aparece el Museo Arqueológico Argentino Ambato y el primer Museo Argentino del Deporte Nacional e Internacional, Pierre de Coubertin. A este popurrí se agrega la capilla Sagrado Corazón –la primera en la zona– y la Gruta Virgen de Los Pobres: dos postas religiosas que hacen a la identidad local.
No hay comentarios:
Publicar un comentario