·La combinación perfecta entre naturaleza y aventura" Reserva Natural La Isla e Iglesia Los Navarro, CONLARA, SAN LUIS

Quienes tengan el privilegio de recorrer este verdadero hallazgo natural disfrutarán de la belleza de sus paisajes y todo un ecosistema natural donde la fauna y la flora se fusionan. Como si fuese poco, al final del trayecto se arriba a una cascada color esmeralda.

La Reserva La Isla se encuentra a 8 kilómetros de la localidad de Lafinur. La surca el Río Conlara y es custodiada por la histórica Iglesia de “Los Navarro”. Los interesados en conocer el lugar pueden acceder a información en la propia municipalidad de Lafinur, desde donde les podrán indicar el camino para acceder.

El recorrido se realiza junto al guardaparque, Eduardo Falcón, quien conoce cada rincón del lugar y todo lo relacionado a la flora y fauna autóctona de este paraíso.

Iglesia abandonada Los Navarro
La capilla se ubica en el paraje La isla, llamado así porque en época de inundaciones, del río se desprendía un brazo que dejaba aislado el lugar entre dos cursos de agua.

El edificio no tiene cubierta y nunca la tuvo, es más fue abandonada en ese estado hace unos 250 años atrás.
Que nos dice la historia oficial sobre sus orígenes y su posterior derrotero, nada, tan sólo hipótesis transmitidas de boca en boca y quizá aggiornadas por algún viajero con facilidad para la mitomanía.
En cuanto a las tres hipótesis que redactan las tres historias posibles podemos decir que la primera habla sobre dos hermanos, los Navarro que hace unos 250 años construyeron una capilla en ofrenda a favores recibidos y que nunca se pudieron poner de acuerdo sobre el nombre del santo que regiría la misma, uno imponía San Antonio como patrono y el otro a San Pedro, quizás por una cuestión de devociones personales o simplemente en relación directa con sus nombres, la discordia fue tal que las obras quedaron paralizadas y la capilla nunca llegó a entronizarse.
La segunda hipótesis habla de un boicot del Cura Brochero hacia los hermanos y su empresa en respuesta a que éstos nunca colaboraron con la obra del eclesiástico y la tercera menciona a la histórica rivalidad entre los Funes y los Navarro, los mayores propietarios de tierra de la zona. Los primeros habían construído la capilla dedicada a Nuestra Señora de las Mercedes que vimos en el post anterior y los segundos, más arrogantes decidieron edificar una de mayor volúmen para demostrar su poder, y aquí entra lo fantástico, los Funes habrían desarrollado algún conjuro para que el edificio se partiera por la mitad como lo vemos hoy día inutilizándolo para cualquier uso a futuro, la verdad esta versión es la más bizarra y la que uno quisiera fuera la verdadera, pero las rajaduras deben tener que ver con causas estructurales o consecuencia de terremotos.

El interior de la iglesia el monte abanza sin piedad. La verdad el lugar y los acontecimientos logran generar una realidad espectral, casi mágica, de lugar imposible de creer y contar.